domingo, 26 de abril de 2015

Varoufakis y la lucha contra la Troika

Últimamente, el tema de conversación en Bruselas, según tengo entendido, es la negociación "18 contra 1" que los ministros de finanzas europeos están llevando a cabo contra el ministro griego, Yanis Varoufakis. Estas 18 figuras, a los que los ciudadanos les importan lo mismo que su programa,  consideran que el plan contra la austeridad que Syriza prometió y que Varoufakis, como representante del voto griego, quiere llevar a su país, es más o menos un insulto hacia la Unión Europea. Los planes de austeridad, reducen el déficit, pero también los salarios, las pensiones y los derechos sociales de los ciudadanos. ¿De qué le sirve a Grecia reducir su déficit y pagar la deuda, si su gente vive cada vez más en el borde del abismo de la pobreza? Varoufakis, hablaba con Jordi Évole hace una semana, y le decía, sin tapujos: yo peleo porque mis ciudadanos salgan de la pobreza, y para eso, hay que empezar a dedicarle dinero a ellos, y no a los bancos. Es tan sencillo como eso.
Y escuché hace no mucho otra frase que decía: "Las cosas que parecen sencillas, se catalogan como demagogia, pero quizá es que son así de sencillas".  Es bastante deprimente pensar que en cuanto a un político le preocupa el pueblo más que el dinero, se le tacha de demagogo, populista y de formular propuestas inviables, sin dejarlo que se explique claro está. Esto, es otra cosa que habría que destacar del profesor Varoufakis, un académico que de verdad ha estudiado la economía y la comprende, es despreciado por sus homónimos en Bruselas porque "realiza discursos muy académicos". Deberían darle gracias, porque más de uno, de los que ocupan las carteras de finanzas en Europa, tendría que aprender algo, aunque sea mínimo, de economía.

Aquellos que gobiernan, saben como salir de la crisis, porque existen precedentes de como salir de una crisis, el problema está en que quizá les interese que esta crisis se convierta en crónica. Para salir de otras crisis, gobiernos como el británico o el americano depreciaron su moneda, mejorando su competitividad y saliendo de la crisis. ¿Por qué en España o en Grecia no se puede hacer eso? Porque los países de la UE que no han recibido un gran golpe de la crisis se niegan a depreciar su moneda para que los otros estados realcen su economía. En definitiva, si Syriza demuestra a sus votantes que se podía salir de la crisis de una forma no agresiva contra la ciudadania, podría ser ejemplo para los ciudadanos de otros países y quizá, el imperio conservador de la UE, se vendría abajo.